El seguro de vida por fallecimiento es uno de los más habituales en España. Por esta razón, es bueno conocer cómo tributa y qué impuestos hay que pagar cuando los beneficiarios reciben la indemnización. Te lo contamos en el blog de MV Aseguradores.
¿Qué es un seguro de vida por fallecimiento?
Un seguro de vida por fallecimiento es un contrato que se establece entre la aseguradora y el tomador del mismo. En este, la aseguradora se compromete a pagar una indemnización pactada en la póliza a los beneficiarios que el tomador designe.
Se trata de un seguro que tiene como finalidad dar seguridad financiera a quienes se quedan tras el fallecimiento de una persona.
Beneficios principales de un seguro de vida
Dentro de los mayores beneficios, el que más importante es el brindar seguridad financiera a la familia o beneficiarios. Con el capital asegurado, lo que se espera es cubrir aquellos gastos que aparezcan como imprevistos, así como los previstos.
Por ejemplo, si la persona que fallece tiene una hipoteca o préstamo, se podrá pagar con ese dinero.
Diferencias entre tomador, asegurado y beneficiario
Cuando se habla de tomador se refiere a la persona que contrata el seguro y que consta como titular del mismo. Mientras que el asegurado es la persona a quien se le cubre en caso de fallecimiento. Por otro lado, el beneficiario es la persona o personas que se indica que recibirán la indemnización en caso de que fallezca el asegurado.
La mayoría de veces el tomador y asegurado coinciden, pero puede no ser así.
Tipos de impuestos aplicables al cobrar un seguro de vida
En el momento en que se cobra un seguro de vida, se aplican diversos impuestos. Estos dependerán del tipo de cobertura que se tenga contratada y la situación personal del beneficiario.
Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD)
Es el impuesto que el beneficiario pagará según el grado de parentesco con el fallecido. También dependerá de la cantidad de indemnización que reciba. Hay que aclarar que el importe a pagar puede variar de una comunidad autónoma a otra, ya que en muchas hay reducciones e incluso exenciones.
IRPF en caso de invalidez o cobertura de ahorro
Cuando el seguro de vida que se contrata es el de ahorro o se tiene una cobertura de invalidez, ese dinero que se reciba se tributa como rendimiento de capital mobiliario. Dependiendo de la cantidad, entrará en unos tramos u otros y determinará el porcentaje a pagar.
Diferencias según la comunidad autónoma
Como comentábamos, hay ciertas comunidades autónomas que aplican reducciones o bonificaciones en lo que se refiere al Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD). Lo mejor es consultar la normativa de tu propia Comunidad para tener en cuenta dichas reducciones.
Cabe destacar que se tributará según las normas de la comunidad autónoma en la que residía el fallecido.
¿Cuándo se paga el Impuesto de Sucesiones?
Ahora que se tiene claro que el ISD lo paga el beneficiario cuando recibe la indemnización, es importante conocer en qué momento se hará el mismo.
Plazo para la autoliquidación del ISD
El plazo habitual es de seis meses desde la fecha en la que fallece el asegurado. Ese es el tiempo que tienen los beneficiarios para presentar toda la documentación. En algunos casos excepcionales se puede solicitar una prórroga de seis meses.
Reducciones y exenciones en el ISD
Dependiendo del grado de parentesco se puede obtener una reducción o exención del ISD. Generalmente, son los cónyuges y los hijos que son menores de edad los que tienen mayor reducción. Otros factores que conllevan una mayor reducción son alguna minusvalía o la edad del beneficiario.
Casos especiales de tributación en seguros de vida
Hay algunas situaciones particulares en las cuales la tributación de este seguro puede variar. Tienen mucho que ver con las coberturas contratadas y el rol de los beneficiarios.
Tratamiento fiscal si el tomador y beneficiario son la misma persona
Si el tomador del seguro y el beneficiario son la misma persona, entonces no se va a tributar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD). Aquí lo que sucederá es que esa indemnización pasará a ser parte del rendimiento del capital mobiliario y se tributa como IRPF.
Excepciones en seguros de vida por enfermedad grave o invalidez
Cuando el seguro de vida barato cubre alguna situación específica como una enfermedad grave o invalidez, el tratamiento fiscal será diferente. Nuevamente, las indemnizaciones serán cobradas por el tomador y asegurado por lo que se consideran capital mobiliario para el IRPF. De todos modos, hay algunas Comunidades Autónomas que en caso de minusvalía o enfermedades graves permiten una reducción de la carga fiscal.
¿Cómo declarar un seguro de vida en la renta?
Si te sucede alguno de los casos anteriores, entonces se debe tributar en la declaración de la renta como rendimiento de capital mobiliario.
Declaración de rendimientos de capital mobiliario
Esta indemnización que recibas se sumará a lo que es la base imponible del IRPF. La cantidad real a declarar será la que se desprenda de la diferencia entre el capital percibido y las aportaciones que se hayan realizado. Ese será el importe declarado como rendimiento del capital mobiliario.
Escalas de gravamen en el IRPF
A la cantidad que se vaya a declarar como rendimiento se le aplicará una escala de gravamen. Por ejemplo, a los primeros 6 mil euros se le aplicarán un 19 %. Cuando sea entre 6.001 y 50.000 euros será del 21 %. A partir de los 50 mil euros, la tributación será del 23 %.
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